Sigue avanzando lenta esta temporada, aunque este capítulo trae alguna sorpresa interesante.
-En el muro vemos las consecuencias del retorno de Jon, que ahorca a los 4 cabecillas de la traición, Allister y Olly incluidos. Al final del capítulo le entrega su capa a Edd el penas y le dice que dirija el Castillo Negro, ya que él ya no está bajo ningún juramento.
-Vemos a Sam y Gilly de camino a Antigua. Sam pretende dejar a la salvaje con su familia, los Tarly.
-Arya progresa a buen ritmo en su entrenamiento y acaba recuperando la vista. Parece que ya está lista.
-Mientras Cersei y Jaime buscan la manera de acabar con el Gorrión supremo y el resto de sus enemigos, Kevan Lannister y el resto del consejo pasan de ellos. Qyburn por su parte planea usar los “pajaritos” de Varys para recopilar información.
-Ramsay Bolton recibe la visita del hijo del gran Umber, que solicita su ayuda para resistir a los salvajes en el norte. Ramsay le pide que se arrodille ante el y le jure lealtad. El norteño se niega y le dice que le ha traído un regalo: Osha, Rickon Stark y la cabeza de su lobo huargo…
-Daenerys llega a Vaes Dothrak y se reúne con las viudas de los Khal. Se entera de que se va a discutir qué hacer con ella porque se fue por su cuenta tras la muerte de Khal Drogo y eso está prohibido.
-Por su parte Tommen tiene una charla muy interesante con el Gorrión supremo. Aunque iba a exigirle que perdonase a Cersei, el gorrión parece manipular muy bien al joven rey.
-Varys descubre que son los amos de otras ciudades los que financian a los hijos de la arpía.
-Bran por su parte ve el asalto de su padre a la torre donde tenían a su hermana Lyanna Stark, presa.